Las células adultas se pueden reprogramar genéticamente para obtener células madre pluripotentes ‘inducidas’ (iPSCs). Las iPSCs se comportan como células madre embriónicas, pueden dar lugar a cualquier tipo celular, ofreciendo oportunidades para estudiar, tratar y potencialmente curar enfermedades. En el caso de enfermedades genéticas, se podría utilizar iPSCs creadas a partir de células del mismo paciente para un tratamiento personalizado.